La crueldat, com quansevol vici, no ha de tenir cap motiu, nomès la oportunitat per executarla...

diumenge

Irene y la primavera


No percibo el olor a primavera que debería sentir estos días.
En el libro de mi vida la primavera queda desterrada
al prolongar yo los inviernos y otoños.
Abril me pasa inadvertido, me abandona
sin darme a penas cuenta.
Pero abril me regaló algo
tan hermoso que ni me pertece
algo único y exquisito,
a un amor infinito
que huele a flor recien abierta
amor infinito y rios transparentes.


Para los 14 años de mi hija Irene.

1 comentari:

Nebroa ha dit...

Me gusta tanto leerte...
Brindemos por las primaveras que nos quedan y que aprenderemos a estirar, porque sabemos hacer más cosas que las que siempre hemos hecho.
Las catorce primaveras de ella pueden ser el perfecto aliento para conseguirlo. Mua