La crueldat, com quansevol vici, no ha de tenir cap motiu, nomès la oportunitat per executarla...

dimecres

Reclamo


Despierta la Diosa a la concupiscencia.
Reclama la lujuria que le pertenece,
los Dioses duermen aletargados inmoralmente.
Un mortal de saliva y barro,
eso es, no un Dios,
colmando, ensanchando, pronunciando
las dulces o sórdidas palabras
que la carne desbocada provoca.
La Diosa lasciva,  desea ser
 concubina, amante y puta de un mortal.
Ser una hembra en las manos graciles
en dar forma y moldear  pieles.
Resbalarse en sus fluidos
y devorarlos.
Reclama la Diosa su mortal amante.

dilluns

Confusiones Idealizadas


Tarde, con retraso,  recibió  respuesta. Sentir era sólo idealización necesitada, fantasía, cine. Lo dijo Luis Eduardo, más cine por favor, que todo en la vida es cine y los sueños cine son.
Fue en ese cine, ¿te acuerdas? James Dean NO tiraba piedras a casa blanca alguna, NI mucho menos al este del Edén.
Sencillamente la repudió por tener los labios blancos,  pese a la cábala languida de la afirmación "yo nunca abandoné a nadie", aunque tal argumento era inverso a lo invertido.
Voltea y camina despacio, si mira sólo verá la espalda, silueta roja como semáforo estropeado. Paso acotado, los colores aleatorios no existen. Paso de servidumbre con barreras atrincheradas sin legalizar. El incuestionable desmayo de una mala interpretación. Una película sin guión con demasiados anuncios plublicitarios. Apagaron las luces y empieza la sesión en blanco y negro interpretada por un actor oscarizado por alfombra rojo semáforo, soberanamente mullida para el mejor de los actores INMORTALIZADOS. La pseudoatriz secundaria es la de labios blancos y mandíbulas desencajadas. La boca gélida recibe las pedradas, la lapidación. No eran piedras, eran afilados bisturis fuera del Edén. El lanzador necesita un blanco, la diana de turno, la mujer de labios blancos esta vez. Es perfecta, jamás se mueve ni parpadea, mueve sólo sus blancos labios para pronunciar amor, amor, amor. Sólo es  cine, y los sueños cine son. El cine de autor es así, real como la NO vida esta.
El actor fue un mito INMORTAL. La actriz de segunda de labios blancos y tristes ojos murió joven. Me interesé por su nombre y nadie supo responder. Sentí el dolor de sus labios blancos, óbices ya. Demacrada le brillaban los ojos discretamente cuando el INMORTAL le  lanzó los afilados elementos derrochando su sangre,  color rojo semáforo estropeado . El despiadado guión, escrito por un prestigioso elemento, ni el realizador, ni productor,  ni director, ignoraron el secreto a voces de la  boba labios blancos. No merecía que prestarán su habilidad en un papel de segunda categoría. El INMORTAL oscarizado siempre fue el protagonista.